viernes, 30 de marzo de 2012

Sin nada que decir

30/03/12

Sin nada que decir
¿por qué te escribo?
Me juzgas por vivir
sin un motivo,
sin una meta,
sin principios ni fines.

Sólo un poeta
que espera que le arruines
la vida con verdades,
que explotes e ilumines
todas esas maldades
que nos hacen humanos.

Sólo otro bardo errante
con un dolor insano,
que mira hacia adelante
y nunca va a otra parte,
que cree que lo importante
tan sólo se comparte,
que no vende su arte,
regala su poema
al roce de la yema
del dedo de su amante.

Y no cree que el dinero
dé la felicidad,
y siempre fue sincero
y nunca tuvo un precio
y vive en soledad
y como un loco o un necio
busca la libertad.

The marriage of Earth and Death

16/03/12

Sueñas despierta,
he descubierto
mentiras tan ciertas...
No soy Roberto,
nunca esa puerta
ha estado abierta
porque estoy muerto.
Nunca se acierta,
todo se yerra,
nunca hubo paz
en esta guerra
contra uno mismo,
sólo un incendio
y un gran abismo.
Lee este compendio
del pesimismo,
son las memorias
de unas historias
sin heroísmo,
sólo un cobarde
que se rebela
de tarde en tarde:
en un alarde
de insania vuela,
sigue la estela
de una estrella fugaz.

Nunca hubo paz
en esta guerra...
Toda la Tierra
está inmersa
en esta batalla perversa,
es el testigo
con que conversa
siempre a su abrigo
el enemigo.
La Tierra
encierra
el secreto
del muerto,
cubierto
por completo
de más tierra.
Y aun tras la muerte
esa mano inerte
se aferra a la tierra
que lo encierra.

Sueñas despierta,
vives durmiendo,
envejeciendo...
Esta es mi oferta:
mata el momento,
toma mi aliento.
Te miento atento,
por si me invento
una verdad.
Tu soledad
es el sustento
de mi maldad.

Dame una oportunidad
o ciento,
si lo intento
sé que te podré fallar
de nuevo,
no miento...
te debo
más de un lustro sin amar.
Irredento
yo te llevo
con mis versos a un altar
y te bebo
tan sediento
que no te puedo tragar,
y vomito
en un rito
que nos ha de separar.
Fue bonito,
duró poco,
no se puede pedir más.

martes, 13 de marzo de 2012

10 años

13/03/12

10 años mellando espadas,
quebrando huesos,
violando a hadas,
robando besos.

10 años matando sueños
de lugareños,
quemando casas
hasta las brasas,
prendiendo fuegos
en entrepiernas
imberbes, tiernas,
oyendo ruegos
nunca escuchados,
mordiendo pechos,
rompiendo labios,
muy satisfecho
de mis agravios.

Calcinando aldeas,
hallando placeres
en las mujeres
que más deseas.
Matando esposos,
violando hijas,
vendiendo madres
por baratijas.
Y torturando,
cual buen normando,
hallar el oro o
plata escondida:
pobre tesoro
por tantas vidas.

10 años de saqueo
más es lo que deseo,
10 años de cruzadas,
10 años de matanzas,
10 años de estocadas
con espadas
y lanzas,
10 años de jadeos
sobre pequeñas niñas,
10 años de jaleos,
trifulcas y de riñas
en bares y burdeles,
10 años más de expiación
buscando la salvación,
10 años matando infieles.

miércoles, 7 de marzo de 2012

Tornafuye

07/03/12

Te busco y te rehuyo,
te temo y te persigo
como el tacto de un leproso,
como el llanto de un amigo.
Me muestro y me escabullo,
y valiente y alevoso,
me arrepiento y me maldigo.

Locuaz a tus oídos,
me escondo a tu mirada;
los sueños me he prohibido,
no tengo miedo a nada.
Y tímido y pervertido
seguiré la mascarada
como un loco con-sentido.

Un lunático... y asceta
que se arrastra por el lodo,
un enfático... poeta
que reniega ya de todo,
que protege lo mezquino
y se juega lo precioso,
que se burla del destino
y se ríe de su suerte,
que lo veja sin reposo,
que ya no busca atajos,
pues han visto sus ojos
que la vida es el camino
más directo hacia la muerte.

martes, 6 de marzo de 2012

Tragos de Leteo

06/03/12


En las noches en que bebes del Leteo
(aunque algunos lo bautizan como alcohol)
nunca logras imponerte a ese deseo:
ser salvaje y perder todo control.

Es deseo de violencia desmedida,
es deseo de ese sexo de sudor,
es deseo de beberte ya la vida
como un trago de bebida
sin sabor.

El deseo ancestral de ser salvaje,
devorar, como animal, todo alimento
y follar cual semental sobre el follaje;
dormir cansado,
beber sediento,
cruzar a nado,
secarte al viento,
corre sin rumbo por todo el prado
y sin aliento
y sin un hado
y sin destino,
sólo tus huellas
harán camino
y las estrellas
serán tu luz.

Emprende
el viaje
salvaje,
allende
los bares,
los mares
de luces que naufragan
en vasos en que tragan
la sangre como vino.

Navegó sobre espuma
en un mar que rezuma
de cerveza
y de olas.
Con tristeza
y a solas,
como un buen marinero,
cada noche se enrola
con el gesto
sincero
del que presto
se inmola.